Sí señores, esto es segundo de bachillerato.

Terminó el verano, volvimos a las clases, pero este año no es uno de entre otros, este año terminamos el instituto, estamos en segundo de bachillerato, hay que dar todo lo que podamos dar de nosotros y un poco más si se puede, nos jugamos el seguir otro año aquí, en el pueblo, repitiendo, pff... más nos vale sacarlo adelante.

Al principio de curso la cosa no parecía tan grave, estábamos más relajados, algún que otro comentario o actividades, pero nada que no se pudiese terminar en una tarde de forma más o menos relajada. Pero a finales de octubre comenzó esto de verdad. Seis horas al día. Nos levantamos temprano, llegamos al instituto, allí cada profesor manda ejercicios de su asignatura, se supone que si no llevamos a la práctica lo que día a día trabajamos en clase la cosa no irá bien. Vale, hasta ahí bien, pero luego llegas a casa, almuerzas, ayudas a recoger la mesa y demás, y entre una cosa y otra terminas poniéndote a hacer la tarea a las cuatro. Haces los deberes, te pegas media tarde haciendo todo lo que es para el día siguiente y cuando ya por fin has terminado te tienes que poner a estudiar, porque al día siguiente tienes un examen, y al siguiente otro, y así... Pero bueno, hasta ahí normal, un poco más duro que otro curso cualquiera, pero es lo corriente, ya que es lógico que la dificultad se incremente a medida que avanzamos de curso, pero ahora es cuando llega el gran problemón: SELECTIVIDAD, es la palabra más oída desde que empezó el curso. A veces parece que ya no pensamos en el curso en sí, sino en selectividad. Por ejemplo, terminas de hacer un examen, y sobre todo al principio no da tiempo de acabarlo, ¡¡no da tiempo!! todo porque el tiempo que te dan es el mismo que te darán cuando hagas selectividad, para que cojas práctica y te salga mejor, sé que lo hacen por nuestro bien, pero es agobiante. 

Y luego llegan los fines de semana en los que pretendes hacer infinidad de cosas y no te da tiempo de hacer ni la mitad.

¿Que si recomendaría que hiciesen bachillerato? Pues sí amigos... porque hoy día sin este título, no se va a ningún sitio, y los que lo podemos terminar este año, más vale que lo terminemos porque tal y como están los recortes en educación no sabemos lo que les espera a las generaciones futuras. Ánimo a todos y a seguir.